Chloe desembalaba con ilusión las cajas de la mudanza. En pocas semanas comenzaría sus estudios en la universidad, y vivía con emoción aquel momento. Su primer apartamento. Su primera vez viviendo lejos de casa. Un mensaje de voz interrumpió aquel momento de ilusión:
"Chloe. Necesito hablar contigo. No puedo... no quiero seguir ocultándote la verdad sobre como murió realmente tu madre. Reúnete conmigo en esta dirección. Sólo allí podrás comprenderlo todo"
¿A qué se refería su padre? No le respondía al móvil. La dirección mostraba una histórica mansión con más de dos cientos años de vida. La mansión Beresford. ¿Por qué su padre le urgía a acudir allí? Chloe sólo tenía una forma de descubrirlo.